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Aprueban
legisladores un punto de acuerdo y denuncian que pone en riesgo la vida de unas
50 mil personas, pero el gobierno estatal y el municipal de Jiutepec evaden su
responsabilidad.
El pleno del
Congreso aprobó por unanimidad un punto de acuerdo mediante el cual solicitan
cancelar el proyecto de introducción de una línea subterránea de energía
eléctrica de 115 mil voltios, debido a que no es sustentable y pone en riesgo
la vida de unas 50 mil personas y pese a ello el gobierno del estado y el del
municipio de Jiutepec evaden su responsabilidad.
El instrumento
parlamentario fue presentado por el diputado José Manuel Agüero Tovar, para que
la Secretaría de Obras Públicas y la Secretaría de Desarrollo Sustentable del
gobierno del estado, así como el ayuntamiento de Jiutepec, cancelen
definitivamente esta obra que abastecería de energía a la planta productora de
llantas Bridgestone Firestone, y que pasa por las colonias Porvenir y Morelos,
de Jiutepec, y la Santa Martha del municipio de Cuernavaca.
El diputado
representante del VII Distrito que comprende Jiutepec Sur, argumentó en tribuna
que sin el consenso social y con recomendaciones expresas de empresas como
Teléfonos de México y PROCIVAC, así como por los organismos operadores de agua
de los municipios de Jiutepec y Cuernavaca, se lleva a cabo la obra de
construcción de una línea subterránea de transmisión en la vía pública.
Señaló que el pasado
22 de febrero se dieron cita autoridades estatales, municipales y los comités
ciudadanos en la colonia el Porvenir, en el lugar donde se reanudaron los
trabajos de excavación e introducción de la línea de energía, logrando los
vecinos que se detuviera la obra, quienes
exigen -en base a estudios que les han sido presentados-, que se cancele
de manera definitiva por no ser sustentable y causar afectaciones en la salud
de los habitantes de la zona.
Por su parte, el
diputado Javier Bolaños Aguilar se sumó a la propuesta tras reconocer que si bien es cierto que se trata de una empresa
que genera una gran cantidad de empleos y hay que fortalecer la inversión, por
otra parte “no se deben entregar cheques en blanco” ya que según la información
proporcionada sobre el caso, no se han observado las mínimas normas de
construcción ni criterios de sustentabilidad que deben contener este tipo de
proyectos.
La legisladora
Griselda Rodríguez Gutiérrez manifestó
que “es cierto que son importantes las
inversiones, pero ningún dinero sirve cuando existe este riesgo para la ciudadanía”,
mientras que el diputado Héctor Salazar Porcayo se adhirió y dijo que reconoce
el requerimiento de mayor capacidad de voltaje de la empresa Firestone, “pero
no a costa de la seguridad de los morelenses”,
ya que advirtió “ponen en peligro la vida de más de 50 mil habitantes en las colonias de
Jiutepec”, por lo que propuso se cancele definitivamente y tomen otra
alternativa.
El legislador Manuel
Agüero Tovar abundó que no están en contra del desarrollo económico del estado
ni mucho menos del municipio y que tienen en claro que se necesita proveer de
energía eléctrica a la empresa, pero “presenta muchas irregularidades y es un
tema que se ha venido dando desde el 2011”.
Señaló que “el
problema es por dónde la quieren pasar”, ya que la zona tiene una densidad
poblacional muy alta, y lamentó que tanto las autoridades estatales como las
municipales pretendan deslindarse del problema argumentando que se trata de una
obra federal, cuando, por ejemplo, el municipio tiene que ver con la licencia
de construcción y la administración estatal con la sustentabilidad.
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