- En el marco del Día Internacional de la Cruz Roja los diputados hacen un llamado a autoridades de los tres órdenes de gobierno.
En el marco del Día Internacional
de la Cruz Roja, el Congreso exhorta a los poderes del Estado y a los
diferentes niveles de gobierno a generar mesas de trabajo para que de manera
institucional fortalezcan la interacción entre los organismos públicos y la sociedad,
constituyendo así las bases que impulsen el sistema normativo del Voluntariado
en el Estado.
El punto de acuerdo aprobado por
unanimidad fue presentado en la pasada sesión ordinaria por el diputado Jordi
Messeguer Gally, con el propósito de elevar a un rango de interés social la
figura del Voluntariado, como expresión de una sociedad madura y con fuerte
arraigo en la solidaridad y el altruismo.
El documento resalta la
importancia de esta organización internacional que da la pauta para otros
ámbitos en los que la participación ciudadana es igualmente valiosa y un necesario
complemento de la actividad pública.
El instrumento parlamentario
destaca que la Cruz Roja cimienta su espíritu en la participación desinteresada,
en la capacidad de apertura hacia sectores realmente vulnerables y son los
voluntarios la voz, la vitalidad y la fuerza que hace posible cumplir la misión
institucional.
Con esta propuesta, el Poder
Legislativo busca impulsar la presencia de voluntarios en toda la entidad, así
como realizar un marco jurídico pionero e innovador brindando certeza y
seguridad a las actividades de los voluntarios, fortalecer con proyectos
sustentables las acciones de organizaciones cuyo fin sea el interés social,
herramientas sencillas para el control y evaluación de actos de organizaciones
no gubernamentales solidarias con problemáticas en los municipios, además de la
capacitación a órganos de gobierno para la gestión de proyectos de voluntarios.
La propuesta de punto de acuerdo
señala que en el marco del Día Internacional de la Cruz Roja debemos generar en
la comunidad el rencuentro con el altruismo y la solidaridad; además, es
imperioso que la libertad sea de tal modo gestionada en el voluntariado que no
sea un deber o una obligación pues muchos ciudadanos forjan desde la infancia
un profundo sentimiento de entrega y trabajo desde la gratuidad; es decir, que
no exista contraprestación económica de ningún tipo.
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